jueves, 6 de noviembre de 2008

La sexualidad dentro de la Iglesia

No es fácil hablar de un tema como éste, porque es causa de muchas controversias, y hasta hace unos años un tema tabú. Pero quiero recordar que la Iglesia, esta formada por hombres y mujeres sexuales, y por supuesto, los sacerdotes y religiosos también somos seres sexuales. Aunque hay que entender el verdadero sentido de la sexualidad, no encasillándola y no reduciéndola a los temas de las relaciones sexuales, porque con ello se empobrece el término, es una sexualidad más amplia, donde nosotros optamos no por una donación total a una persona de distinto sexo o del mismo, sino optamos por una donación total a todas las personas, hasta tal punto que nuestra vida no nos pertenece.

Pero de esto no quería yo hablar, quizá otro día profundice en el tema, aunque hay muchas cosas escritas sobre ello. Quería hablar de un reciente documento que ha sacado el Vaticano, que esta removiendo los pistones de muchas imprentas. El documento se llama "Orientaciones para el uso de las competencias de la psicología en la admisión y en la formación de los candidatos al sacerdocio".

Lo he pegado, porque con este nombre, no hay ser que lo aprenda. En fin, el tema polémico, es un asunto ya antiguo, y que en un documento de hace 10 años ya se remarcó. La no admisión a la formación sacerdotal de las personas con tendencia homosexual.

No voy a confesar si estoy de acuerdo o no con el documento, aunque lo podáis imaginar, pero creo que es un tema que se debe madurar dentro del seno de la Iglesia.

En primer lugar, son seres creados por Dios, y por tanto deben ser amados y respetados. Son mi hermano y mi hermana. No sé porque se da en algunos sectores de la Iglesia ese total rechazo.

En segundo lugar, creo que Jesús en estos días, diría esta frase " los homosexuales os precederán en el reino del cielo".

Tercero. Parece que al hablar de homosexualidad, se habla de desenfreno sexual, pederastia, anticlericales... Pero, ¿nos creemos todo lo que sale en los medios de comunicación? Creo que dentro de la Iglesia hay muchos sacerdotes homosexuales, y seguramente viven la castidad perfectamente. Aunque reconozco que no debe ser fácil, si nos referimos a la vida religiosa, de convivir con personas que fisicamente te son atrayentes.

Cuarto. Aportan otra visión distinta. Pueden aportar su mayor sensibilidad por las cosas, pueden aportar nuevas ideas, a esta Iglesia que a veces aún huele a rancia..

En fin, no quiero crear polémica, no es mi intención. Yo cambié mi visión cuando conocí la homosexualidad de un amigo, y tuve tiempo de llorar con él, y tiempo de revisar cuantas veces había juzgado a los homosexuales, encasillándolos a todos en un mismo parametro. Como he dicho, es un tema polémico, y por ello se puede discutir.

Un fuerte abrazo a tod@s.

1 comentario:

CORTINITAS DEL SAGRARIO dijo...

Xavi Xavi...que te veo por muy mal camino...que como te agarre el Ratzi por las orejas te las arranca! jejeje
Puesto que este es un blog veo que plural, abierto, tolerante, atraviliario, libertino, insolente y descarado, me voy a pronunciar. Como a mi no me pueden echar, pues hale, hablemos!: yo creo lo primero de todo, que efectiviwonder los sacerdotes, monjas, frailes y toda esta tribu son seres sexuales y como tales, no deberían prescindir de una parte tan importante y bella de la vida de cualquier persona. El sexo junto con esquiar y comer, es lo mejor que hay en la vida. Yo creo que salvo unos cuantos rancios que todavía quedan en el seno de ésta, la Santa Madre Iglesia, el común de los componentes del clero mandaría a la mierda semejante cosa, esa cosa llamada celibato que desde luego el que se la inventó (que desde luego no fué Jesús), se cubrio de gloria. Y vosotros por qué no os unís, montáis vuestro sindicato como todo pichipata, ponéis al Ratzi en su sitio y decidís que váis a liaros con tio o tía según gustos caiga quien caiga.¿Que ya está bien no? No os iban a echar a todos!! digo yo, no sé...Además no solo os afecta a vosotros, de vez en cuando, una encuentra algún "pájaro espino" modelo siglo XXI, y lo tienes que mirar como a un pastelito en un escaparate de la mejor pastelería en domingo por la tarde, osea cerrada, te quedas con un palmo de narices. Y alomejor era el ser con el que hubieras sido más feliz que chupito. Pero nada, fruta prohibida. Así que mirar a ver si os juntáis o hacéis algo para acabar con semejante lacra dentro de la Iglesia, que en estos tiempos que corren da la risa. Tendrán que desaparecer las vocaciones para que alguien piense en dejar a las personas ser personas con todo lo que ello conlleva, sexualidad incluída, y no obtener dichas vocaciones mutilando una parte tan humana como es el sexo. El que no quiera casarse que no lo haga, yo tampoco quiero y no soy monja, pero el que quiera? por qué no? ¿por qué no se sabe nada de Jesús en tantos años de su vida? qué hizo y con quien en esos años? yo como no me creo la mitad del Evangelio...
De la homosexualidad ni hablar, quien piense que es una enfermedad, debería mirarse el mismo, porque seguramente el enfermo es el. Mental.
La homosexualidad es una forma de manifestar la tendencia sexual, desde luego no mayoritaria, pero no por eso anormal. Ni mala. Una cosa es lo normal, otra lo bueno. Por ej. es normal fumar, pero no es bueno. Puede ser anormal ser homosexual, porque no es lo mayoritario, pero no tiene por qué ser malo.
¡qué vuelva el pájaro espino! (pero en carne mortal)
A ver, si alguno me conoce puede seguir haciéndolo. Jejejeje