martes, 15 de noviembre de 2011

Difuntos carmelitas

Hoy recordamos en la Orden del Carmen a nuestros fieles difuntos. Son  muchos los frailes que nos han precedido y que han dado su vida por el Carmelo, por eso es justo que os acordemos de ellos. Muchas son las personas que me han pasado por la cabeza esta mañana en la misa, a todos los he tenido presentes, a todos lo he encomendado a Dios.


Hoy sólo os dejo una oración de una carmelita sobre la muerte, quizás estamos hartos de escuchar respuestas estereotipadas sobre la muerte, como por ejemplo: descanso eterno, vida eterna, otra vida, visión beatífica... quizás estos conceptos se nos hacen un poco difíciles de entender o de asimilar, por eso os dejo esta oración que tiene otro tipo de lenguaje, aunque el fin es el mismo:


«No sé lo que ocurrirá al otro lado, cuando mi vida haya entrado en la eternidad: solamente estoy segura de que un amor me espera. Sé que será el momento de hacer balance de mi vida, tan pobre y tan sin peso, pero más allá del temor estoy segura de que un amor me espera. Por favor, no me habléis de glorias, ni de alabanzas de bienaventurados, ni tampoco acerca de los ángeles.

Todo lo que yo puedo hacer es creer, creer obstinadamente que un amor me espera. Ahora siento llegar la muerte y puedo esperarla sonriendo, porque lo que siempre he creído lo creo con más fuerza. Cuando muera, no lloréis porque es ese amor quien me lleva consigo. Y si veis que tengo miedo, —¿por qué no iba a sentirlo?—, recordadme sencillamente que un amor, un amor me espera». 

(SOEUR MARIE SAINT-ESPRIT, Simone Piguet 1922-1967, Carmelo de Nogent sur Marne).

2 comentarios:

Marlon dijo...

Bel riflessione. Ma secondo me l'autore svaluta un po'l'immagine tradizionale del cielo, no?

Unknown dijo...

Non lo credo, penso che questa carmelitana sottolinea più una visione con un forte trasfondo di San Giovanni della Croce, l'unione definitiva dell'anima con il suo sposo, ma non nega la visone classica, soltanto preferisce questa altra. Un forte abbraccio.